CRÓNICA DE UNA AUSENCIA ANUNCIADA

Tarde o temprano esto iba a suceder, te todas maneras tenía que pasar. Parece reflexionar el profesor-tutor del 4to año B, es que los chicos se están relajando demasiado, al menos eso percibe, aunque como siempre algunas de sus alumnas le dicen “profe yo estoy bien, cumplo con todas mis tareas, y el profesor de mate, me ha dicho que apruebo” cosa que al final del mes en los exámenes no responde ni una pregunta. Hoy han hecho demasiada bulla, se dedicaron a gritar y por eso se quedaron 30 minutos más después de clases como castigo por su conducta y por no haber hecho la tarea. El profesor – tutor las ha cambiado de sito, las ha separado de sus amigas pero el efecto fue peor, ahora hablan de extremo a extremo, la bulla se vuelve altisonante, como si un mercado mayorista se estableciera en estos momentos en el salón. Algunas de ellas están molestan, con el pico estirado , no quieren hablar, su molestia es notable, pero el profesor-tutor piensa que es un estado de ánimo pasajero, que durará algunos días...




Ya es hora de salida, los alumnos de los otros salones pasan por el 4to B ellos se ríen, comentan, algunos se asoman por la ventana, identifican al profesor que los castigó - tenía que ser ese profesor, cuando no, ese won es malo, comenta uno de ellos- ese gordito es atorrante, le gusta hacer eso, agrega otro. Silencio absoluto, el colegio se quedó mudo, sus paredes descansan después de una larga jornada y el profesor tutor se queda callado, intentando poner el rostro ceñudo, para mostrar la molestia del caso.


Jóvenes si se portan mal, mañana los castigaré otra vez- dice el profesor a sus alumnos, con voz seria y autoritaria. El salón no responde, todos están en silencio- haciendo su tarea y de repente, una voz tímidamente, desafiante ( si cabe la expresión) responde- profe usted nos castiga por las puras- El profesor – tutor identifica, es una chica de ojos grandes y de menuda estatura, de voz casi ronca y segura. Nos es por gusto, señorita, yo también estoy perdiendo el tiempo- responde el tutor-.


Entonces si no les parece y no están conformes conmigo, pediré que me cambien de tutoría- agregó el tutor-. Todos se callaron, el silencio del salón se complementó con la del colegio. Entonces la voz casi ronca de la alumna rompió el silencio del aula, y respondió- eso sería perfecto-.


Otro silencio, este silencio es incómodo, doliente, todos esperaban que el profesor- tutor responda algo, pero no dice nada. Calla ante esta respuesta inesperada. Los minutos transcurrieron y el tiempo de castigo finalizó, no se despidieron como siempre lo hacen y eso evidenciaba que el día fue un día de miércoles.


Al día siguiente el profesor tutor del 4to B no entró al salón, no desarrolló el plan lector con sus alumnos, su lugar fue reemplazado por el profe de computo, los rostros extrañados de los jóvenes denotaba cierta incomodidad, una de ellas preguntó- ¿Y el profesor? - ¿ya no va a venir? dice que ustedes lo hacen renegar todo el tiempo, creo que va pedir su cambio para ser tutor de otro salón- agregó el obeso profesor y mientras decía eso, el rostro compungido de una chica de cabellos ensortijados y que grita bastante, lo decía todo. Algunos de los alumnos se extrañaron con la respuesta del profesor de cómputo y entonces el clima se volvió más gris que nunca.


Pasaron los minutos y cuando vieron que el profesor- tutor no entraba a las aulas que le correspondía, los alumnos entendieron que no era una broma, que su tutor al que por muchas veces le profesaron una estima ya no les iba a enseña. Para el primer recreo, un grupo de alumnos y no solo del 4to B , sino que también de otros salones fueron a buscar al profesor para pedirle que por favor regresara, se disculparon por las travesuras cometidas y por no haber hecho la tarea, pero el profe aseguró que ya no regresará más para enseñarles, que el otro profesor les enseñaría en lo que va del año. Las lágrimas de algunas comenzaron a brotar, y los varones agacharon el rostro como señal de derrota (en ese momento, estoy seguro que él se moría por abrazarlos y decirles que mañana mismo regresaría) y con cierto dolor compartido el profesor – tutor del 4to B se marchó de ese lugar.


Para el segundo recreo, otra comitiva llegó para hablar con el profesor, esta vez tenían un letrero de colores, hecho sobre una cartulina de color, en el cual decía regrese, no se vaya, sobre todo la misma chica que ayer le había contestado al profesor, le decía que regresara y que no se podía ir, que si todo lo que estaba haciendo era para darles una lección. Ya lo consiguió, pero que no se vaya- le insistía una y otra vez. Pero el profesor tomando aire y aguantándose las ganas de decirle que mañana mismo lo verían leyendo a primera hora en el salón, se fue a otra parte.


El profesor reflexionó sobre su actitud, reflexionó sobre el cariño que le tenían sus alumnas y llegó a la conclusión de que era cierto lo que le decían, que lo estimaban mucho, que realmente ese profesor, muchas veces llamado renegón, atorrante por dejar excesivas tareas, había hecho que ese salón puede demostrarle algo de aprecio. Y a la hora de salida, cuando sus rostros ya no eran picudos por la cólera, sino que estaban con los ojitos caídos, por la tristeza, el profesor les informó que mañana estaría con ellos que las cosas serían igual, los jóvenes se alegraron, recuperaron su rostro de siempre y se fueron a sus hogares.


Realmente no sé porqué escribo esto, puesto que es algo que le pasó al profesor Johnny y no a Fausto, pero creo que él me encargó esta historia, me encargó publicar algo sobre ese salón que en ocasiones les saca de sus casillas, pero que en el fondo nunca olvidará, oye Fausto- me dijo el profesor- escribe sobre esto que me pasó y diles al final de todo que yo siempre seré su tutor, que en el aula y fuera de ella siempre estaré ahí para ayudarlos y que siempre a pesar de las cosas que hacen sigo pensando que son buenos chicos y que quiero ver lo mejor de ellos y no lo peor. Es por eso que sigo estudiando y seguiré estudiando para que ellos tengan como maestro a una persona muy preparada, ya que son y será una gran familia para mí.

posdatas:

PD 1 . Quiero agradecer a mis alumnos y alumnas del 4to B que ayer me dieron un pequeño pero muy significativo homenaje, MUCHAS GRACIAS!!!!
PD 2:  Al mismo tiempo,  dedico este video a todos los estudiantes del coelgio, sin distinción alguna ( porque todos son iguales para mí) pero de manera especial a mis queridos colegas, que sé  que ven mi blog  muy amenudo.
PD 3: FELIZ DÍA DEL MAESTRO A TODOS LOS PROFESORES QUE ENTRAN AL BLOG,  APLAUSOS PARA ELLOS.

Como anecdota, les puedo decir que este video lo estuve buscando por más de 7 años, no sabía quién la cantaba ni como se llamaba, pero que hace poco lo encontré y no dejo de escucharla, por eso es muy especial para mí.



Dedicado a aquella persona que  busca mis peores errores y aquellos que me hacen enojar